Y AHORA VUELVEN LAS NOTIFICACIONES POR LA TARDE… ¿VUELTA A LA (A)NORMALIDAD?

Tras la reunión de este miércoles, 8 de abril, de la Comisión de Empleo Central, integrada por la Dirección de Correos y los sindicatos firmantes del Convenio, ha trascendido la pretensión de recuperar el turno de tarde para el reparto de notificaciones administrativas.

¿No le basta al Presidente con los más de 800 positivos de coronavirus entre l@s trabajador@s de Correos? Ni tampoco le parecerá suficiente que, con las cifras en la mano, el riesgo de contagio de l@s trabajador@s de Correos es 7 veces superior al del resto de la ciudadanía, lo que se traduce en que somos el segundo colectivo más contagiado, únicamente superado por l@s sanitari@s

Parece ser que desde la cúpula directiva están más preocupados por la imagen pública de Correos y, sobre todo, a que se siga difundiendo la  situación de vulnerabilidad que padecemos l@s trabajador@s de Correos. Estos días han sido varias las fuentes periodísticas que nos han transmitido las presiones por parte de ciertos directivos de Correos para no publicar entrevistas ni los datos sobre contagios, cuarentenas y centros cerrados que les  trasladamos desde CGT. Una censura que, curiosamente, coincide en el tiempo con la operación de blanqueamiento de las supuestas campañas “solidarias” que reproducen acríticamente algunos medios de comunicación, mientras se sigue endosando el reparto del grueso de la paquetería comercial a l@s trabajador@s de CorreosExpress, abusando de su mayor precariedad para proseguir con el negocio de los Amazon, AliExpress, etc.

Desde CGT nos negamos a aceptar esta supuesta vuelta a la “normalidad”, palpable también en el incremento del volumen de trabajo en pabellones y carterías, con envíos que poco tienen que ver con los de un servicio público esencial. Es inadmisible que en el contexto de una crisis sanitaria de esta envergadura, la Dirección de Correos no tengan reparos en sobrecargarnos de trabajo y las jefaturas sigan presionando para trabajar, incluso sin los equipos de protección adecuados. 

NO SOMOS CARNE DE CAÑÓN:

NUESTRA SALUD, ANTES QUE SUS BENEFICIOS.