Desde que en 2011 determinados sindicatos propiciasen la discriminación entre colectivos de Correos, excluyendo del turno de lunes a viernes al personal de Oficinas, USES y Pabellones, ha existido una reclamación constante que estas mismas organizaciones han ensordecido y manipulado.
Tenemos un ejemplo reciente con la firma del Acuerdo plurianual en diciembre 2018, que prometía la finalización del turno de sábados obligatorio en los primeros seis meses del año y que, finalmente, ha caído igualmente en saco roto. O peor, introduciendo sobre la mesa la inclusión del sector postal (Correos) en el Real Decreto de jornadas especiales y sirviendo en bandeja la desregularización de nuestro horario de trabajo.
Por ello, estimando este momento como crucial, desde la CGT impulsamos nuestra HUELGA INDEFINIDA DE SÁBADOS en la que pretendemos que sea una jornada de seguimiento masivo: “EL 30-N, NADIE VIENE” y los siguientes 2 sábados sean asimismo secundados por el resto de l@s trabajador@s afectad@s, en unas semanas donde se subraye este problema, que ya ha durado demasiado tiempo.
En todas las reivindicaciones hay puntos de inflexión que pueden hacer que estas tomen mayor fuerza y repercusión. Nadie negará el impacto social de un reclamo tan justificado como este y tan largamente desoído. El 30-N, así como el 7 y el 14 de Diciembre, tenemos que dejar clara nuestra respuesta ante la Dirección y sus sindicatos. Son 3 turnos y 3 huelgas en plena campaña (también de elecciones sindicales), cuando la reivindicación tiene mayor afectación y visibilidad social.