Este jueves 17 de enero, se ha publicado la novena y última adjudicación del Concurso de Traslados convocado el mes de noviembre de 2015. En la provincia de Barcelona, se han asignado 9 plazas de Reparto 1, 12 de Reparto 2 y 13 de Atención al Cliente (1 de ellas a tiempo parcial). En total, desde la primera adjudicación en mayo de 2016, se han asignado un total de 898 nuevos destinos en la provincia de Barcelona.
Más allá del análisis de estas cifras y a la espera de constatar que ningún peticionario/a se haya quedado sin adjudicación de destino, desde CGT nos hemos propuesto resumir en este comunicado el listado de agravios que se han producido en los más de 3 años que ha tardado en resolverse el Concurso. Empezando, precisamente, por dicha demora, recordamos que la función principal del Concurso de Traslados es posibilitar la movilidad voluntaria de lxs compañerxs que lo precisen, con lo que el retraso de las adjudicaciones ha supuesto un grave perjuicio para todxs aquellxs que por necesidades familiares o de otra índole precisen trasladarse a otra localidad, reingresar en Correos tras acogerse a una excedencia o simplemente optar a otro puesto de trabajo.
Seguimos con un clásico que se ha ido produciendo en todas las adjudicaciones; la opacidad en la asignación de plazas, ocultándose destinos y puestos de trabajo. Esta práctica habitual de la dirección, con la connivencia de los sindicatos firmantes en la comisión paritaria encargada del desarrollo del Concurso, se ha visto acompañada además de la posibilidad de renuncia al destino asignado, algo no contemplado en las bases y que a la práctica se ha articulado como una herramienta para eliminar puestos de trabajo cuya oferta desaparecía misteriosamente en la adjudicación siguiente. Desde CGT nos congratulamos de la posibilidad de renuncia a petición del trabajador/a, siempre que esta se recoja en las bases como un derecho de lxs peticionarixs y no un favor a criterio de las jefaturas de zona, e incorpore el compromiso de asignar la vacante que origina dicha renuncia en la adjudicación siguiente.
Para finalizar, recordamos que tras unas primeras adjudicaciones frustrantes –en las que se asignaron un número irrisorio de plazas-, hubo que esperar hasta 2017 para que una cuarta adjudicación menos rácana, ante la inminente entrada de lxs aprobadxs en el examen de consolidación realizado en 2016, que hizo colisionar los derechos de unxs compañerxs frente a otros, en una actuación de absoluto desprecio a lxs participantes en el Concurso.
¿Y ahora qué? Una vez finalizado este tortuoso concurso de traslados, es el momento de reivindicar que en la próxima convocatoria, se convoque un proceso que ofrezca garantías a todxs los peticionarixs. En CGT tenemos claro que el principal problema con la actual regulación del Concurso de Traslados, recogida en el III Convenio Colectivo y Acuerdo General, es la facilidad con que la dirección puede jugar con las plazas y los plazos de las adjudicaciones con el beneplácito de las comisiones que regulan su funcionamiento. Desde CGT seguimos reivindicando un Concurso de Traslados que garantice la movilidad voluntaria de lxs trabajadorxs, exigiendo en nuestra Plataforma Reivindicativa para el IV Convenio Colectivo y Acuerdo General un concurso semestral con la oferta de TODAS las vacantes reales.