Desde que se conoció la noticia de la ampliación del concurso de traslados que se inició en noviembre de 2015, las versiones cruzadas (y los silencios cómplices) sobre el cómo y el dónde se ha acordado dicha ampliación han expuesto las vergüenzas del sindicalismo de concierto. Nuevamente quedan claras las turbias relaciones de la dirección con algunas organizaciones sindicales y de cómo se utilizan las comisiones (de empleo, de tiempo de trabajo, etc.) para mercadear con los derechos de todxs. Eso sí; “con un poco de lío”, como ellos mismos reconocen.

En CGT tenemos claro que el principal problema con la actual regulación del Concurso de Traslados, recogida en el III Convenio Colectivo y Acuerdo General (firmado por las mismas ooss que ahora se tiran los trastos por la cabeza…), es la facilidad con que la dirección puede jugar con las plazas y los tiempos con el beneplácito de las comisiones que regulan su funcionamiento. Esto se traduce en que las seis adjudicaciones realizadas hasta el momento se han dilatado más de dos años para asignar 3487 plazas, mientras que en el mismo período ya se han anunciado tres procesos de consolidación con una oferta de 5820 plazas. En efecto, las cuentas no cuadran y algunos deberían dar explicaciones de por qué consienten este juego de trileros a la dirección de Correos.

Desde CGT seguiremos reivindicando un Concurso de Traslados que garantice la movilidad voluntaria de lxs trabajadorxs, exigiendo en nuestra Plataforma Reivindicativa para el IV Convenio Colectivo y Acuerdo General un concurso semestral con la oferta de TODAS las vacantes reales.

SI NADIE TRABAJA POR TI, QUE NO DECIDAN POR TI

¡ORGANÍZATE Y LUCHA!